Aparecen
señales en las transformaciones del sector agropecuario, que marcan el rumbo
seguro hacia la conquista de la compleja y decisiva tarea, acompañada por crecientes
aplicaciones de la ciencia, la técnica y la innovación tecnológica, como
aspectos fundamentales para el ascenso
en la producción de viandas, hortalizas, granos, carne, leche y frutas.
En la puntera
del despegue están la consolidación de unos 34 polos productivos, la proyección
de una enorme franja agrícola que impulsarán representantes de las Fuerzas
Armadas Revolucionarias en el sur de los municipios de Amancio, Colombia y
Jobabo, el rescate de autoconsumos de los organismos, el fomento de módulos
pecuarios y el fortalecimiento del encadenamiento productivo entre el Sistema
de la Agricultura, las unidades de la Industria Alimentaria y otros frentes.
A los
mencionados propósitos se suman el refuerzo en la aplicación de abonos naturales,
la rehabilitación de bancos de semillas, la rotación y el intercalamiento de
cultivos, el escalonamiento de cosechas y la diversificación de variedades, con
acentos en cosechas de arroz, plátano, frijol, garbanzo, maíz, malanga, papa, frutas
y hortalizas.
El refuerzo
en la entrada de maquinarias agrícolas y sistemas de riego para ampliar el
exiguo 2 por ciento de las áreas cultivables con tal beneficio apunta hacia la
materialización del estratégico objetivo.
Las
prioridades concretan acciones para el crecimiento en el ganado vacuno en busca
del paulatino aumento en carne y leche, unido a los programas para ascender en
los resultados del ganado menor, porcino y avícola. Los ganaderos pueden seguir
avanzando en el aporte a las ventas para la población y el turismo; así como en
la entrega de cueros para la revitalización de la Empresa Nacional de Tenería y
Pieles.
A los
trabajadores de la Pesca, tanto acuícolas como del mar con los respectivos
eslabones, les corresponde continuar buscando fórmulas para el necesario ascenso
en las entregas para acercarse cada vez más a las demandas de los diversos
destinos
En la
estrategia diseñada, el encadenamiento productivo adquiere fortaleza con las inversiones
en la industria nacional. En el territorio tienen presencia en instalaciones
para el secado y molinado de arroz en Camagueycito, una planta para beneficiar,
secar y empacar granos, un moderno porcionador de carne, un salón industrial para elaborar varios derivados de pescado, una
fábrica de piensos y otra de conservas en Jobabo; paralelamente realizan
reparaciones y mantenimientos en centros relacionados con la diversidad de renglones
alimentarios.la
Con la
materialización de lo previsto, continuarán abriendo puertas para incrementar las exportaciones y la sustitución
de importaciones, en respaldo a los necesarios fondos económicos de la nación y
el territorio.
Tanto los cronogramas
en acción como los previstos conforman una cartera de recursos y prioridades para
responder al añorado autoabastecimiento territorial de alimentos, que
fortalecerá el ascensos en el empleo laboral y la creciente satisfacción de las
demandas de la población.
Estamos ante
un panorama que despeja viejas incógnitas y reta a los factores vinculantes a
desplegar consagración, audacia y sabiduría con ciencia para aprovechar todas las oportunidades y
evitar lamentaciones. La marcha ascendente reclama esfuerzos mancomunados entre
las estructuras y la población a fin de contribuir con el imprescindible aporte
para conquistar el futuro luminoso a que aspiramos.
Aparecen
señales en las transformaciones del sector agropecuario, que marcan el rumbo
seguro hacia la conquista de la compleja y decisiva tarea, acompañada por crecientes
aplicaciones de la ciencia, la técnica y la innovación tecnológica, como
aspectos fundamentales para el ascenso
en la producción de viandas, hortalizas, granos, carne, leche y frutas.
En la puntera
del despegue están la consolidación de unos 34 polos productivos, la proyección
de una enorme franja agrícola que impulsarán representantes de las Fuerzas
Armadas Revolucionarias en el sur de los municipios de Amancio, Colombia y
Jobabo, el rescate de autoconsumos de los organismos, el fomento de módulos
pecuarios y el fortalecimiento del encadenamiento productivo entre el Sistema
de la Agricultura, las unidades de la Industria Alimentaria y otros frentes.
A los
mencionados propósitos se suman el refuerzo en la aplicación de abonos naturales,
la rehabilitación de bancos de semillas, la rotación y el intercalamiento de
cultivos, el escalonamiento de cosechas y la diversificación de variedades, con
acentos en cosechas de arroz, plátano, frijol, garbanzo, maíz, malanga, papa, frutas
y hortalizas.
El refuerzo
en la entrada de maquinarias agrícolas y sistemas de riego para ampliar el
exiguo 2 por ciento de las áreas cultivables con tal beneficio apunta hacia la
materialización del estratégico objetivo.
Las
prioridades concretan acciones para el crecimiento en el ganado vacuno en busca
del paulatino aumento en carne y leche, unido a los programas para ascender en
los resultados del ganado menor, porcino y avícola. Los ganaderos pueden seguir
avanzando en el aporte a las ventas para la población y el turismo; así como en
la entrega de cueros para la revitalización de la Empresa Nacional de Tenería y
Pieles.
A los
trabajadores de la Pesca, tanto acuícolas como del mar con los respectivos
eslabones, les corresponde continuar buscando fórmulas para el necesario ascenso
en las entregas para acercarse cada vez más a las demandas de los diversos
destinos
En la
estrategia diseñada, el encadenamiento productivo adquiere fortaleza con las inversiones
en la industria nacional. En el territorio tienen presencia en instalaciones
para el secado y molinado de arroz en Camagueycito, una planta para beneficiar,
secar y empacar granos, un moderno porcionador de carne, un salón industrial para elaborar varios derivados de pescado, una
fábrica de piensos y otra de conservas en Jobabo; paralelamente realizan
reparaciones y mantenimientos en centros relacionados con la diversidad de renglones
alimentarios.la
Con la
materialización de lo previsto, continuarán abriendo puertas para incrementar las exportaciones y la sustitución
de importaciones, en respaldo a los necesarios fondos económicos de la nación y
el territorio.
Tanto los cronogramas
en acción como los previstos conforman una cartera de recursos y prioridades para
responder al añorado autoabastecimiento territorial de alimentos, que
fortalecerá el ascensos en el empleo laboral y la creciente satisfacción de las
demandas de la población.
Estamos ante
un panorama que despeja viejas incógnitas y reta a los factores vinculantes a
desplegar consagración, audacia y sabiduría con ciencia para aprovechar todas las oportunidades y
evitar lamentaciones. La marcha ascendente reclama esfuerzos mancomunados entre
las estructuras y la población a fin de contribuir con el imprescindible aporte
para conquistar el futuro luminoso a que aspiramos.
C
de lo proyectad junio, 2019
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