Estamos en diciembre con los instrumentos laborales en ristre, la fe en las anunciadas transformaciones económicas de la nación y la alegría por las proyecciones de las festividades de fin y inicio de años, en saludo al aniversario 62 del triunfo de la Revolución.
En Las Tunas todo transcurrirá bajo las estrictas medidas sanitarias orientadas por el Ministerio de Salud Pública para ayudar a frenar la proliferación de la Covid-19, pero con la decisión de trabajar duro para concluir el difícil 2020 con los mayores índices posibles en los distintos sectores y luego dar paso a la diversión, aunque no sea con el contagio tradicional en los diferentes escenarios.
El territorio sorteará las limitaciones de recursos, y enfatizará en terminación e impulso de obras, el despliegue de la zafra chica para fabricar una importante cantidad de toneladas de azúcar como antesala de la contienda 2020-2021 y reforzará la producción de alimentos. Estos tres frentes decidirán en gran parte de las previsiones de desarrollo del próximo año, en el cual serán mayores las propuestas para la aplicación de la estrategia económica y social hasta el 2030.
Una atención prioritaria seguirá siendo el incremento de renglones para avanzar en las exportaciones y la sustitución de importaciones, con la conjugación de las potencialidades de las formas estatales y no estatales que van eliminando trabas en el complejo trayecto hacia la conquista de la importante misión encomendada.
La etapa contribuirá a la concreción de propósitos para consolidar la trayectoria hacia el autoabastecimiento alimentario territorial y los planes de desarrollo local, que en ocasiones han adolecido de acciones más efectivas para aprovechar mejor los bienes materiales con el concurso de las fuerzas de las respectivas comarcas, como eficaz mecanismo para acelerar la solución paulatina de múltiples demandas en las capitales municipales y en cada comunidad.
No habrá descanso en el seguimiento a la preparación de las condiciones para la aplicación de la anunciada Tarea Ordenamiento, decisiva en las previstas transformaciones de la economía cubana, sin descuidar las principales conquistas populares aportadas por la Revolución y manteniendo el humanitario concepto de que nadie quedará desamparado.
Permanecerá la aplicación de medidas para tratar de que Las Tunas continúe en el pelotón de provincias con menores índices de casos infestados con el nuevo coronavirus, combinado con el combate contra la propagación del mosquito Aedes aegypti, con el interés de evitar complicaciones en el panorama higiénico-sanitario.
Junto al trabajo estarán los momentos para recordar pasajes, hechos históricos, héroes y mártires, que dieron notables aportes en la conquista de la soberanía del pueblo en 1959, y que hoy forman parte del preciado historial de la Patria.
Cada sector tiene definidas sus prioridades por el advenimiento del nuevo año, y conoce las vías para lograrlas con mancomunados esfuerzos individuales y colectivos. Ayudarán al impulso de tareas las jornadas especiales por el Día del Educador, el Constructor, la Cultura. la Medicina Latinoamericana y el aniversario 50 de la fundación de la FEEM, que tendrá su acto nacional en la provincia.
Aunque cada persona, institución y organización tiene su espacio físico para desplegar esfuerzos, todo tributará al empeño general de contribuir a que el país construya el deseado socialismo próspero y sostenible en beneficio de todos.
Como colofón retumbará la alegría individual y colectiva en torno a cada celebración, a pesar de las dificultades socio-económicas del 2020, agravadas por la crisis económica internacional, el recrudecimiento del bloqueo de Estados Unidos contra Cuba y el SARS-CoV-2.
Trabajo, homenaje y diversión inspirarán a los tuneros para asumir los retos del 2021 con la decisión de resistir y vencer, como digno legado de Fidel a cuatro años de su desaparición física.