Aunque
hablo de un tema que recorre actualmente al mundo, hoy en Las Tunas y en el
resto de Cuba el asunto relacionado con los altos precios de los productos agropecuarios y la puesta en práctica de acciones para bajarlos aparece en
cualquier intercambio o encuentro de personas.
Entre los
tuneros se ubica ocupa el primer lugar entre las cuestiones más comentadas,
pues eso tiene relación directa con la alimentación de la población.
El
reordenamiento en marcha prevé la contratación a los productores del 80 por
ciento o más de sus cosechas, restablecer puntos de recogida en cada estructura
agrícola, rescatar placitas y otros mercados estatales para acercar las
mercancías a los barrios y fijar los precios máximos de venta en toda la red,
sean estatales o particulares.
Entre las
medidas vigentes figura el refuerzo de la vigencia en las entradas de los
pueblos y los límites con las provincias vecinas para evitar los desvíos o
traslados nacionales. Ya son numerosos los casos decomisos de mercancías
procedentes de diversos puntos del territorio y otras regiones, y las mismas se
han vendido en los mercados tuneros a los precios rebajados por los Consejos de
Administración Provincial y Municipales.
La medida
anterior alegra a los consumidores y alerta a los productores e intermediarios
con la firmeza de la labor emprendida de manera conjunta por múltiples
organismos.
Los tuneros
optimistas consideran que las medidas anunciadas por el delegado provincial de
la Agricultura sobre el reordenamiento de la producción, la comercialización y
la distribución pueden transformar la compleja situación actual y resolver para
siempre una cuestión bastante criticada por la población por las notables deficiencias
detectadas en los diferentes eslabón de la amplia cadena.
Entre los
pesimistas figuran los que estiman que será muy difícil que la empresa de
Acopio, bastante deteriorada en su estructura material, vaya a dar el salto que
nunca ha registrado a través de su larga existencia. Por eso, valoran que en la primera etapa se pueden desaparecer
muchos renglones que aparecen hoy en puntos de venta a pesar de los altos
precios.
Tanto
productores como consumidores aplauden los mecanismos que se ponen en práctica
para cortarles las alas a los revendedores, que han aprovechado muchas fisuras
de los eslabones que van desde la producción hasta la distribución para
acaparar buena parte de los renglones alimentarios para incrementarles los
precios.
El éxito de
las acciones depende del rigor en el control y la exigencia que se apliquen en
cada estructura, empezando por el Sistema de la Agricultura y la Asociación
Nacional de Agricultores Pequeños (ANAP).
No hay comentarios:
Publicar un comentario