Un buen aguacero
en la tarde-noche de este sábado,
interrumpió la tranquilidad habitual de la villa de Las Tunas, que sin
algarabías se vistió de gala por su cumpleaños 221 de fundada. Su rejuvenecido rostro,
especialmente en el centro histórico, reverdecía laureles a pesar de la larga
trayectoria contra vientos y mareas.
En su
estampa y recuerdos ayudaron los medios de difusión masiva de la localidad con
distintos materiales recurrentes, y el detalle de que San Jerónimo, se acuña como
el santo patrón de la localidad.
Antes y
después de la lluvia, los hijos festejaron a su manera. Grupos o ciudadanos e
instituciones más vinculadas con el funcionamiento de la ciudad, acogieron con
beneplácito el onomástico de la capital de la oriental provincia.
Quienes
silenciosamente o entre comentarios recorrieron calles y avenidas de la urbe
hacían su aporte al recordatorio de la fecha; mientras, la compartían aquellos
que descansaron en bancos de los parques o se detenían en esquinas, aceras y
otros sitios emblemáticos.
En la mente
de muchos, la efeméride despertó curiosidad y nuevos bríos para afianzarse en la tranquila urbe, que permite ir al
pasado y proyectarse al futuro con el empeño de hacerla más agradable y
funcionar para la vida.
La única
villa de Cuba quemada tres veces por los patriotas del Ejército Mambí a fin de
evitar que fuera tomada por el colonialismo español, hoy tiene la suerte de mostrar
una arquitectura ecléctica y una sólida cultura mezclada con elementos
originarios de múltiples confines.
Sobre sus
hombros, las transformaciones urbanísticas se abrazan con aire de modernidad de
los pueblos cubanos y de muchas partes del mundo.
Varios
escenarios citadinos conservan el cactus Tunas, que le da el nombre y que
actualmente está ubicada en el Balcón del Oriente Cubano, apelativo que identifica
la identifica en el país.
El ambiente
de modernidad imbrica los distintos ángulos de la labor transformadora de la
obra de la Revolución, que se extiende por la nación desde el primero de enero
de 1959 con el triunfo del Ejército Rebelde comandado por Fidel Castro.
El paulatino
esfuerzo de sus hijos posibilita el rostro rejuvenecido y el creciente
desarrollo con la residencia de más de 100 mil habitantes.
Apacible como
siempre Las Tunas se alzó sobre su historia y con alegría callada festejó su
cumpleaños 221
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