Días de intenso ajetreo familiar

Los días finales de diciembre se convierten en jornadas de constante ajetreo en las familias cubanas, pues cada cual a su manera busca los recursos imprescindibles para la organización de sus festejos de fin y comienzo de años.

Transitamos por la segunda ocasión del año(la primera en las vacaciones masivas de julio y agosto), en que deben coordinarse todas las acciones familiares, incluyendo los ahorros para la ocasión a fin de estar en posibilidades de encontrar los abastecimientos necesarios pasar cogerla en grande.

Según las posibilidades, se acopian las mercancías que garanticen felices encuentros familiares, al compás de las tradiciones generales y particulares.

Generalmente se priorizan carnes, viandas, ensaladas y bebidas, de acuerdo a las costumbres, que incluyen acopios suficientes hasta para los posibles traslados de personas allegadas de otras provincias o municipios.

Casi siempre la inclinación está sobre el cerdo asado, el congrí oriental, la yuca y las verduras.

El cerdo asado, que casi siempre está presente, tiene diversas formas de preparación, aunque las más generalizadas son en púa u horno. Y alrededor de estos emblemáticos momentos se crean entusiastas ambientes con bebidas, bailes, algarabías y otros ingredientes del gracejo popular.

El 31 se concibe para encuentros íntimos, que pueden ser en hogares o restaurantes, aunque mayoritariamente se hace en casa. El día primero, unos siguen en los hogares, otros se inclinan por las visitas a distintas locaciones vinculadas con la recreación o el encuentro entre familiares o amigos.

Según las disponibilidades monetarias en cada hogar se comienza el acopio de mercancías con el interés de correr menos en los días finales de los festejos familiares, que pueden ser más largos o cortos de acuerdo a las condiciones de cada estructura.

Conozco a personas que las festividades las realizan escalonadamente, desde el día 24, llamado popularmente como Noche Buena, y llegan hasta las primeras jornadas de enero. Quienes se deciden por esa fórmula alternan días y viviendas, entre familiares y amistades, con la previsión de que no se malgasten los recursos y haya para varias jornadas.

En Las Tunas favorecen las gestiones las celebraciones de ferias comerciales provinciales y municipales, que ofertan amplias gamas de productos y en los alrededores de estas fechas se refuerzan con productos de alta demanda para la ocasión.