viernes, 15 de septiembre de 2017

Único beneficio de Irma

Junto a tantos destrozos, el huracán Irma dejó escasas lluvias para almacenar agua en las deprimidas presas de Las Tunas, como simulando que aportaba algo no criticable.

Hasta eso se le carga a los negativos vestigios de su nefasta presencia, porque fue tan cruel que los lamentables daños no tienen comparación con el minúsculo porcentaje de llenado, que se aproximó al 40, poco distante del 24 en que se encontraban antes de ella.
Los embalses quedaron con sed y a la población maldiciendo porque puedo ser más benévola con los tuneros.
Resignados a sus deseos, no queríamos que hubiera entregado aguaceros más fuertes y prolongados a cambio de mayores afectaciones.
De los ocho municipios, solo Manatí, Puerto Padre, Jesús Menéndez y Las Tunas recibieron precipitaciones por encima de los 100 milímetros. Hasta estas fueron medianas en comparación con las potencias de la nubosidad acompañante que nos rondó. Y como cuestión de ensañamiento, en estos cuatros territorios se registraron las mayores devastaciones.
Con los escurrimientos procedentes de la vecina provincia de Holguín, la presa Juan Sáez, la mayor de Las Tunas y ubicada en el municipio de Jesús Menéndez, milagrosamente acumuló el 30 por ciento de su capacidad al completar 33 mil 520 hectómetros cúbicos
No obstante, los 23 embalses administrados por Recursos Hidráulicos sintieron cierta mejoría, con el completamiento cercano a los130 mil  hectómetros cúbicos, que indudablemente los pone en mejores condiciones para abastecer a la población.




No hay comentarios:

Publicar un comentario